jueves, 17 de junio de 2021

Cogidos de la mano


La palabra entusiasmo viene del griego enthousiasmós, que literalmente significa ser imbuido por el poder de Dios (Theós).

Con la percepción de que no faltará la ayuda del poder divino, los grandes obstáculos se convierten en simples contratiempos fáciles de superar.

El entusiasmo es lo que mantiene encendida la llama de la esperanza. Aunque la meta sea elevada, la fe en la victoria final es lo que da ánimos para continuar. Revitaliza la vida con toques de convicción, ligeramente suavizada. Constituye la certidumbre de que la meta, así, no está tan lejana. La persona tiene derecho a ser lo que siempre ha sido: una chispa de energía divina.

La valentía y el entusiasmo van cogidos de la mano:
 uno alimenta al otro y hace que el trayecto sea más cómodo.

Extracto del libro:
La paz comienza contigo.
Ejercicios de paz para enfrentar las crisis
Ed. Brahma Kumaris Den O’Donnell 

Lo invisible


 Las cosas más poderosas son invisibles. Por ejemplo, las raíces de un árbol, los cimientos de una casa, el átomo, esencia de la materia.

Un ser humano es cuerpo y alma, espíritu y materia, que trabajan juntos, que colaboran, el cuerpo es como el hardware de un ordenador y la energía espiritual, el alma, es un diminuto chip de luz en el que todo está grabado. En el silencio introspectivo, entramos en ese chip de luz, que en realidad es un punto de energía luminosa que nosotros podemos recordar y redescubrir.

Este chip de luz invisible empieza a funcionar con efectividad cuando se conecta con su conciencia originaria y reactiva las cualidades originarias, las cuales capacitan al alma para trabajar y expresarse de forma natural.

La conexión se realiza a través del poder de la concentración; a eso se le llama “conciencia del alma”. El proceso de experimentar esta conciencia del alma se lleva a cabo en la meditación: reuniendo todos los pensamientos de la mente, creando un pensamiento concentrado y yendo hacia el interior muy dulcemente para conectar con el yo originario, el alma.

Para dar estos primeros pasos y concentrar los pensamientos, usamos la conciencia positiva de “soy”, o lo que se llama conciencia “Om Shanti”. “Om” significa “soy”, con el significado profundo de “soy un alma”. Con este conocimiento, viene la experiencia de una identidad espiritual original.

El alma tiene cinco cualidades primarias; podemos decir que son los colores primarios de nuestra humanidad con los cuales pintamos el cuadro de nuestras vidas: paz (cualidad original del ama, en que armonizo con todo cuanto me rodea), pureza (soy lo mismo dentro y fuera), amor (“cuido”, comparto y libero), conocimiento (saber y ser lo que soy para siempre y de verdad) y felicidad (expresión natural de la alegría de vivir e interactuar con los demás).

Extracto del libro:
Pensamiento oriental para la mente de occidente.
Visión del Raja Yoga
Ed. Brahma Kumaris
Anthony Strano

Mientras continúas volando...


                          La humildad es la madre de todas las virtudes.

¿Te parece que es así? Piensa en ello.
Si posees todas las virtudes excepto la humildad,
serás un ser humano virtuoso arrogante de sus virtudes.
Sin embargo, si eres virtuoso y humilde,
serás una encarnación de lo divino.



La auténtica humildad no debe confundirse con la baja autoestima. Compartiré un secreto muy personal contigo: Así como nunca trataré de controlar a nadie, tampoco permitiré que nadie me controle. Así como nunca forzaré mi voluntad ante nadie, tampoco dejaré que nadie fuerce la mía. Esto no es arrogancia. Es amor propio, el poder de la humidad.

El ego tampoco va a desaparecer, así como así. De hecho, te seguirá a todas partes. Incluso en esas meditaciones llenas de luz. Estarás ahí sentado y de repente aparecerá este o aquel pensamiento proveniente de tu ser limitado, y te arrastrará en un segundo. Si te ocurre significa que sigues estando a merced de influencias de un orden menor. Es una señal del ego.

En realidad, siempre que sientas una influencia negativa, interna o externa, el ego será el causante. El ego es muy sutil y por eso no resulta fácil detectarlo. Trabaja de forma subterránea, minando los cimientos de tu verdad. Todo, absolutamente puede henchirlo: Comentarios y críticas; todo tipo de circunstancias y situaciones; cualquier cosa puede dispararlo.

Sin embargo, si te mantienes alerta y diriges la atención a ti mismo, serás capaz de mantenerte humilde. Serás capaz de recordar que todo lo que ocurre es una prueba. Estás siendo probado en tu determinación de no permitir que nada te toque las alas.

Ten cuidado a la hora de usar ojos y oídos. Háblales. Di a tus ojos: “¡Así es como debéis mirar!”, y a tus oídos: “¡Eso no tenéis que escucharlo!”. Mantén tu amor propio recordando que no permitirás que el ego te alcance, que vas a mantenerlo a raya. Mientras continúas volando...

Extracto del libro:
Las alas del espíritu.
Liberar la identidad espiritual
Ed. HCI
Dadi Janki

Dando un paso atrás


Una de las capacidades internas más efectivas que la meditación contribuye a desarrollar es la de desconectarse, dar un paso atrás y convertirse en un observador desapegado.

No se trata de una forma de evasión sino de una manera de aprender a usar más eficientemente nuestra energía. Ser un observador desapegado nos permite ser testigos de la vida que nos rodea, sin perder ni desperdiciar nuestra energía mental en temas y acontecimientos que no podemos controlar y que para nosotros no son importantes.

Ser un observador desapegado nos permite, además, ver el panorama completo de lo que sucede, ya sea una escena internacional o una situación doméstica. Es el fundamento del autocontrol, que nos permite impedir que se generen emociones que no ayudan y suscitar todo lo que es bueno dentro de nosotros.

Estar desapegado del mundo que nos rodea, mientras observamos sin enjuiciar o resistirse a nadie ni a nada, nos permite volver a nuestro estado de consciencia de alma, fácil y rápidamente.

Extracto del libro:
A la luz de la meditación.
Una guía para meditar y alcanzar el desarrollo espiritual
Ed. KIERMIKE GEORGE